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27 mar 2016

CAP 13 ROMA NO PAGA TRAIDORES



CAPÍTULO 13

        Volvieron a visitar a Celsio quien estaba muy contento porque había apresado a Amasis y así podría evitar la muerte de Tiberio.
        Los soldados llevaron a Amasis delante de Estéfanos y pudieron ver que estaba lleno de golpes.
Comprobaron que Amasis les había mentido.
        Después de abandonar la tumba de Benerice intentó desprenderse del papiro y se dirigió a Sinaí.
        Interrogaron a Amasis quien dijo que él había asesinado a Petrosiris de un golpe en la cabeza y a Siamon envenenándolo para robarle el papiro en el teatro de Pompeya.
        Después lo vendió a un judío llamado Abun por un millón y medio de sestercios.
        Abun compró el papiro para que Tiberio no supiera que existía Jesús de Nazaret.
        Abandonaron a Gelio, y al salir llegaron a la conclusión de que el Amasis del desierto y el Amasis de Alejandría no eran la misma persona.
        Pensaron que podían ser dos gemelos, con el mismo nombre, uno de ellos inocente y otro culpable de la muerte de dos personas.
        Más tarde decidieron ir a ver a Filón el judío, seguidor del filósofo Platón, a quien no veía desde hacía once años.

CAP 12 ROMA NO PAGA TRAIDORES



CAPÍTULO 12


        Mientras Estéfanos seguía intentando descifrar los trozos del jerogífico, Manio realizaba otras tareas como preparar la comida.
        Un día Manio vió a Mario que volvía con un acompañante.
Se trataba de Amasis, el calígrafo ayudante de Petrosiris.
Estéfanos preguntó al calígrafo sobre los jeroglíficos y éste le dijo que allí estaba escrito el pasado, el presente y el futuro de Roma.
Según él, Tiberio moriría ahogado por una manta y fijó el lugar de su muerte en Misene, en casa del general Lúculo, y lo asesinaría un traidor de Roma.

Igualmente el calígrafo les dijo que los herederos de un judío llamado Jesús de Nazaret, se sentarían en el trono de Roma.
Los jeroglíficos predecían igualmente la desaparición de Roma donde habría caos, desorden, desgracia e injusticia.
Entonces dejaron marchar a Amasis.

CAP 11 ROMA NO PAGA TRAIDORES



CAPÍTULO 11



        Después de una jornada montados en camello, llegaron a la tumba Benerice. 

Ésta,  no era más que una cueva excavada al pie de una pequeña colina cuya entrada estaba cubierta de escombros hasta el dintel.
Manio fue el encargado de desalojar de escombros la puerta y Estefanos preparó lo necesario para entrar en la cueva.
Como el pasadizo estaba lleno de escombros también tuvo que ayudar a retirarlos, tarea que les llevó dos días.
Tras deambular por diferentes estancias de la cueva, por fín llegaron a la cámara funeraria comprobando que la tumba había sido desvalijada por los ladrones.

Estéfanos con un candil pudo comprobar que alguien había picado en la pared, con el propósito de borrar los jeroglíficos.
En el suelo había restos de la pared y el griego pensó que si recomponía esos restos podría descifrar lo que ponía.


CAP 10 ROMA NO PAGA TRAIDORES



CAPÍTULO 10


Estefanos , Manio y Mario, gracias al barco que Lucio Gelio había puesto a su disposición, zarparon rumbo a Asuán.
 Durante ocho horas remontaron el Nilo con ayuda de una vela rectangular hasta que el viento amainó. Media docena de asnos les remolcaron hasta la cantera de Tura, de donde había salido el mármol del faraón Kefren.

Visitaron la cantera y las pirámides de la meseta de Gizeh.
Acamparon cerca de la pirámide de Kheops.
A la mañana siguiente prosiguieron el viaje haciendo la parada más larga en Tebas, donde se dirigieron al oráculo de los colosos de Memnón.
Estefanos les convenció para que consultaran el oráculo. Los tres formularon la misma pregunta que era si tendrían éxito en su misión.
El oráculo les contestó en griego con voz masculina de distinta manera a cada uno.

Cuando salieron un joven les tradujo las respuestas del oráculo. A Estéfanos le dijo algo incorrecto para  que cometiera un error. A Manio le dijo que triunfaría por encima del dolor y de las dificultades y a Mario que tuviera cuidado para no confundir la fortuna con la arena del desierto.
Por fín llegaron a Asuán y después en la ciudad de File,  Mario se separó de ellos.  Los otros dos, Manio y Estéfanos se dirigieron hacia a la tumba de Benerice.

11 feb 2016

ROMA NO PAGA TRAIDORES (CAP 9)




       



CAPÍTULO 9


Gelio invitó a Estefanos y sus amigos al circo ya que en Alejandría era muy típico las carreras de cuadrigas y gladiadores.
Ellos aceptaron la invitación porque el día anterior no se habían quedado a comer.
El anfitrión iba vestido con una túnica escarlata.
La sorpresa llegó cuando Gelio se quitó la túnica, se puso otra más corta y el casco de los aurigas. Parecía ser que era bastante aficionado, tomaba clases y tenía caballos adiestrados.
Cuando sonó la trompeta comenzó la carrera con cuatro cuadrigas de diferentes colores: blanca, verde, roja..
Tras una dura batalla el ganador fue Gelio, que no solo venció al enemigo sino que finalmente tras ser pedido por el pueblo, Gelio acabó con la vida del contrario.
En realidad era una venganza pero de esta manera parecía como si hubiera hecho esto para acabar con el sufrimiento del enemigo.
Finalmente tras abandonar el hipódromo El Griego y Manio se dirigieron hacia la tumba de Benerice convenciendo a Claudia para que se quedará allí y no los acompañara para no correr peligro de muerte.